Un horizonte aterrador se cierne sobre el tranquilo pueblecito de villa oscura. Ubicado en medio de un siniestro bosque milenario, este lugar solía ser conocido por su gran belleza natural y su gente amigable. Sin embargo, algo ha despertado en las sombras y ahora oscila sobre la comunidad como una terrible maldición.
Cuando el sol se oculta tras las montañas y las estrellas se refugian del maligno resplandor lunar, villa oscura se transforma. Las calles adoquinadas se vuelven lóbregas y desoladas, y el viento susurra amenazas incomprensibles. Los habitantes se ocultan tras sus puertas, temerosos de lo que acecha más allá de sus ventanas.
Son muchos los rumores que circulan por el pueblo sobre este horizonte aterrador. Algunos creen que es la sombra de un antiguo brujo que regresó para vengarse de aquellos que lo quemaron en la hoguera siglos atrás. Otros aseguran que es la encarnación de un espíritu vengativo que busca saldar viejas deudas pendientes.
La oscuridad que reina en villa oscura parece tomar vida propia.
Se dice que en la plaza central, bajo un antiguo roble retorcido, se pueden escuchar lamentos agonizantes todas las noches. Los más valientes aventureros que se acercaron a investigar nunca volvieron a ser vistos, sumidos para siempre en las garras de esta maldición misteriosa.
El terror se ha propagado rápidamente entre los corazones de los habitantes de villa oscura. Las luces permanecen encendidas durante toda la noche, intentando alejar a las sombras acechantes. Cada reloj marcando la medianoche provoca escalofríos, mientras el horizonte aterrador invade los sueños y provoca pesadillas sin fin.
La lucha por regresar a la tranquilidad y la paz en villa oscura continúa. La esperanza sigue viva, aunque tambaleante, mientras sus habitantes se aferran a una posibilidad de expulsar este horizonte aterrador de sus vidas.
