Existe un relato en un pueblo mexicano, el cual cuenta que habitaba una pareja junto a su hijo pequeño. El niño era berrinchudo y grosero, no tenía respeto por sus padres, ni tampoco le gustaba ayudar en las labores de la casa, cada que se enojaba por algún capricho destrozaba todo a su alrededor sin importarle que lo regañaran.
La madre desesperada por no lograr corregirlo, le decía al niño que si seguía teniendo ese mal comportamiento “el cucuy” se lo iba a llevar, sin embargo esto tampoco logró cambiar la actitud del chico hasta que una noche, mientras los padres dormían profundamente, la madre logró despertar al escuchar unos fuertes quejidos proveniente del rincón donde dormía su hijo, cuando se levantó a investigar lo que encontró fue algo que la dejó totalmente sin aliento…
El coco
Una figura espeluznante tapaba con su enorme mano peluda la boca del pequeño mientras lo cargaba con un brazo, cuando la mujer reaccionó ante la aterradora escena comenzó a gritar lo que ocasionó que el padre se levantara rápido, pero lamentablemente ya había sido demasiado tarde… la criatura había brincado y escapado por la ventana llevándose con él al niño. Esa fue la última vez que vieron a su hijo…
Debido a estas leyendas e historias escalofriantes del Cucuy, existe una canción de cuna muy escalofriante, los padres la cantan a aquellos niños que no quieren dormir, su letra es: “Duérmase mi niño, duérmase ya, porque viene el coco y te comerá…”
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